Descubriendo la Arteterapia: manualidades que sanan

En tu interior hay un artista del que nada sabes - Rumi 

Estas vacaciones de Navidad han resultado un periodo muy creativo y fértil para mi, ya que he podido dedicarme a algunas de las actividades que más me gusta hacer en mi tiempo libre: escribir, hacer deporte, manualidades... Además de los ratos de disfrute y juego con mi hijo y de los momentos bonitos con el resto de la familia, en general, han sido días de sentirme habitada, sintiendo una acogedora sensación de paz y bienestar que me ha arropado como si estuviera recibiendo un cálido y mullido abrazo de oso en una noche invernal :o)

Entre el ajetreo propio de las fechas, las constantes visitas de familiares, las salidas en bici a lo "verano azul", las abundantes comilonas, las fiestas de cotillón y demás historias, he podido (y me felicito) reservarme un tiempo para mi y encontrar mi espacio, combinando estos momentos de más actividad, socialización y entrega a los demás, con momentos de auténtica conexión personal, ofreciendo una mirada a mi interior y permitiéndome una entrega también hacia mi misma.

Este punto de equilibrio, de estar por un lado en movimiento y por otro en quietud, se ha convertido en una constante en mi vida y en una necesidad de alternar ambas.
Parece que mi mente funciona más fluida cuando doy espacio a cada actividad a su tiempo y noto cómo el cuerpo proporciona una amable sensación de bienestar, además de sentirlo como un disfrute que alegra el alma y aúna los sentidos.

La calma se ha presentado estos días en forma de manualidades o lo que se conoce hoy en día como Arteterapia, una técnica de desarrollo personal y autoconocimiento que utiliza el arte como herramienta para facilitar la expresión de las emociones, es decir, permite la sanación interior a través de la expresión artística. Y por algún motivo, siento la necesidad de explorar mi mundo interior a través del arte.

Para mí, el arte es juego, y el juego sana. Como actividad lúdica que es, reporta un beneficio emocional, relaja el cuerpo, activa la mente y ofrece las dos cosas que más me gustan: estimula mi creatividad y me permite mantener atención plena en el momento presente.
Me ayuda a darme cuenta de cómo está mi cuerpo, qué emociones surgen, qué necesito expresar...

Las manualidades sanan el alma y tienen un potencial liberador muy elevado, cualquiera que sea su manifestación artística. Ayudan a expresar los sentimientos que muchas veces callamos o que no sabemos transmitir, y lo hacemos CREANDO, dando forma, expresándonos creativamente.

Mis obras de Arteterapia de estas navidades han sido:

Animal decorado con recortes de papel (decoupage)

Aquí he empleado una técnica decorativa que consiste en pegar recortes (decoupage) de papel flexible sobre una figura de papel maché, toda encolada al final para obtener un acabado brillante.
Para darle un aire divertido, colgué sobre su cuello un placa con el nombre y pegué sobre el lomo una cinta de rafia, doblada por los extremos, a modo de alforja. La leña que porta es el toque maestro y el detalle que da más autenticidad a la figura.
Todo el material se encuentra fácilmente en tiendas de manualidades.


Cuadro forrado de rafia y tela

Es una manualidad muy sencilla de hacer. Sobre una base rígida o semirígida (yo usé cartón pluma) pegué una tela de colores neutros (utilicé rafia o tela de saco) para que se viera bien el contenido, y sobre eso fui combinando los diferentes elementos. Las letras blancas son de madera con relieve y las pequeñas negras son pegatina, bien pegadas sobre la rafia deshilachada y ésta sobre otra tela de color verde oscuro, para que contrastara bien.
Aquí hay mil posibilidades de creación del cuadro. Solo hay que encontrar una temática y permitir que la creatividad haga el resto.


Pintar mandalas y flores

La joya de la relajación y de la conexión personal. Me parece increíble la fuerza y la energía que transmiten los colores. Siempre me han maravillado. Y resulta precioso ver cómo el dibujo va cobrando vida a medida que aplicas los colores.
Libros para pintar mandalas hay muchísimos. Yo utilizo uno que se llama: 365 maneras de combatir el estrés diario, que además de los dibujos contiene 365 citas positivas de autores universales que te inspiran mientras te deleitas aplicando el color.
Lo ideal es pintar con rotuladores profesionales, que ofrecen unos colores muy brillantes y permiten un trazo uniforme.

Álbum de scrapbooking

Se trata de un álbum de fotos que puedes personalizar usando recortes de periódico, papel decorado, recuerdos significativos de tu vida... o el material que quieras: tela, cordón, cinta, botones, lo que se te ocurra. Es una técnica muy libre que abarca todo tipo de materiales.
Con esta manualidad, lo mejor es irlo completando despacio, el día que te apetezca rellenar una hoja acudes al álbum; así vas teniendo tiempo para inspirarte, hacerte con nuevo material, recopilar recuerdos... El resultado es una obra muy personal.
En Internet hay tutoriales con mil y una ideas para decorar tu álbum.
Fotos: kit de inicio y primera página decorada.

Me parece una buena idea planificar el año con actividades tan creativas que reportan conexión, bienestar y satisfacción personal y tener el compromiso de mantenerlas durante todo el año. Se puede convertir en tu momento de desconexión del exterior y de conexión con tu interior mientras disfrutas haciendo arte. ¿No te apetece ponerte manos a la obra?